El lanzamiento del póster promocional oficial de los Juegos Olímpicos de París en marzo ha desatado controversia debido a la omisión de la cruz cristiana del Dôme des Invalides. Esta emblemática estructura, que alberga la tumba de Napoleón, es también un símbolo histórico y religioso para Francia, ya que originalmente era una capilla real y aún se utiliza para Misas Católicas.
La ausencia de la cruz en el póster ha generado críticas por parte de legisladores conservadores franceses, quienes la consideran un borrado de la historia y la identidad del país. Esto ha reavivado el debate sobre el secularismo militante de Francia, conocido como laïcité, y su relación con la presencia de símbolos religiosos en la esfera pública.
El ilustrador del póster, Ugo Gattoni, ha afirmado que no hubo ningún motivo ulterior para omitir la cruz, sino que buscaba crear una atmósfera surrealista y festiva. Sin embargo, esta explicación no ha calmado las aguas de la controversia, especialmente a la luz de otros casos recientes de edición de símbolos cristianos en productos comerciales, como las etiquetas de yogur de Lidl y un comercial de televisión de Porsche.
Esta tendencia de eliminar símbolos cristianos de la esfera pública podría atribuirse a diversos factores, como el deseo de no ofender a otras comunidades religiosas, la preocupación por la politización de la religión o la percepción del cristianismo como cada vez menos relevante en una sociedad cada vez más secularizada.
El panorama religioso de Francia ha experimentado cambios significativos en las últimas décadas, con una mayoría de la población que ahora profesa ninguna religión y una disminución en la asistencia a servicios religiosos, especialmente en la Iglesia Católica. En este contexto, el póster de Gattoni podría interpretarse como un reflejo de una cultura cada vez más vaciada de religión, donde la estética y la celebración se anteponen a las tradiciones religiosas.
Sin embargo, la controversia en torno a la omisión de la cruz en el póster de los Juegos Olímpicos de París plantea preguntas más profundas sobre la sostenibilidad de una cultura desprovista de fe religiosa. ¿Qué impacto tendrá esta tendencia en la identidad nacional y en la cohesión social? ¿Es posible mantener una sociedad cohesionada sin referencia a sus raíces religiosas? Estas son interrogantes que continuarán generando debate en el contexto cultural y político de Francia y más allá.
Imagen destacada: Paris2024 - AP
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